Ojos azules en Kabul -Anabel Botella-

A Saira nunca le ha gustado su aspecto. Es rubia, tiene los ojos azules y todos la llaman kharami, o lo que es lo mismo, bastarda. Vive en Afganistán con su hermana, su madre y su abuelo, y cree tener ocho años. Cuando Ramin −un hombre cruel y fiel seguidor de los talibanes− entra en su vida, la desgracia se cierne sobre su familia para siempre. 

Pero no todo está perdido para Saira. La pequeña logra viajar a Valencia gracias a las tropas españolas y crece envuelta en el cariño de su familia de acogida, aunque las pesadillas de su pasado no dejan de visitarla. Cuando Pablo le ofrezca la posibilidad de abrirse al amor, ¿conseguirá sanar las heridas de su niñez y empezar a ser feliz?

Ojos azules en Kabul prometía ser una historia apasionante, un dramón, sí, pero apasionante. Empecé la novela con unas expectativas muy altas, no sé por qué, y aun así no me ha decepcionado para nada. Al contrario. Estoy deseando leer otras novelas de la autora.

Ojos azules en Kabul nos lleva a conocer a Saira, una jovencita rubia de ojos azules que es aborrecida por los hombres y mujeres, incluida su madre, afganos por ser una “bastarda”. Al principio todo parece ir medianamente bien, a pesar del hambre y la falta de dinero, pero es cuando el diablo convertido en hombre entra en su casa para quedarse cuando se dan cuenta de que la falta de comida era un mal menor.

No sé por dónde empezar. Este libro me causó tantísimas emociones que no sé exactamente si puedo expresarlo con palabras. La vida de Saira y de su familia me ha hecho ver las cosas con otros ojos, de querer aportar algo más para el mundo. Sin pelos en la lengua Anabel nos transporta a un lugar al que, creedme, no querríais ir ni locos. Porque aunque todos hemos oído historias de por allí que nos hacen sobrecogernos, pocos nos hemos interesado en saber más.

Vayamos por partes, y nunca mejor dicho. La primera parte nos cuenta la vida de Saira y su familia en Kabul. Es la parte más dura, pero que a mí más me ha gustado. Además, en esta parte, Saira es pequeña y me encantó ver cómo iba evolucionando ante mis ojos. La segunda, Saira ya vive en España desde hace un tiempo, saltamos casi una década para saber cómo es ahora la niña que conocimos anteriormente. Pierde un poco el interés esta parte porque es un cambio drástico desde lo que hemos leído al principio, pero aun así, Anabel sabe mantener al lector enganchado.

 Los personajes. Los personajes son simplemente perfectos. Perfectos no de: Oh, que guapo, te quiero pa’ mi. No. Aquí no hay macizorros con super poderes ni nada por el estilo, pero es que no hace falta. Saira, a la que conocemos ya de pequeñita, es impresionante. La madurez que va adquiriendo la niña a lo largo de la novela es increíble, como ella misma. Al principio, como cualquier niña de 8 años, peca de inocente y no sabe muy bien lo que sucede a su alrededor, solo que su hermana llora, su madre llora y ella no sabe por qué. Me partía el corazón ver los desplantes de Bahar y las reacciones de la niña. Ese odio que se va creando en su interior hacia ella misma y las decisiones que va tomando. La pequeña creo que se ha convertido en mi personaje favorito, al menos femenino. Por otro lado, Laura es… pues como ha de ser mi tocaya. Es una mujer fuerte, muy, muy luchadora, que ha sufrido y ha sabido salir bien parada del dolor.

Por otro lado, el ritmo es apabullante. No te has recuperado del último momento y se te echa encima otro, haciendo que eso de “por favor, un capítulo más” se quede muy, muy corto. En serio, pocos libros me han enganchado tanto. Anabel ha sabido llevarse al lector a su terreno totalmente y hacer de una historia tan dura un motivo para salir a la calle para luchar. Porque no es la historia de Saira. Es la historia de miles de mujeres en el mundo y de alguna forma la autora nos ha traído esa historia para que sepamos lo que hay, para que no cerremos los ojos.

En definitiva, Ojos azules en Kabul es una historia realista, conmovedora y esperanzadora. Una protagonista arrebatadoramente humana que te robará el corazón, un ritmo apabullante y una pluma perfecta harán las delicias del lector durante toda la novela. 

*Muchísimas gracias a Plataforma Neo por el ejemplar.