*Agradecimientos a Planeta por el envío del ejemplar.
El protagonista de El pequeño ladrón de sombras es un niño, sin nombre, que vive sólo con su madre en un pequeño pueblo de Francia hasta que un día descubre que tiene un don: nuestro protagonista puede hablar con las sombras y a través de ellas descubrir los miedos y sueños de la gente...un don que le puede ayudar a ayudar a los demás y también a sí mismo… Una historia de amor con el sabor de los cuentos de siempre. El amor incondicional de una madre por su hijo... el amor que sentimos la primera vez y que el tiempo no puede borrar... el amor que se acaba... una amistad para toda la vida.
Soy de esas personas enamoradas del amor, de las típicas (y
no tan típicas) historias que te ponen la carne de gallina y te hacen suspirar
y enternecerte. Por eso, al escuchar cientos de recomendaciones de este autor,
no pude evitar solicitárselo a la editorial. Y para mí, no he podido escoger
mejor.
El pequeño ladrón de sombras nos relata, en primera persona,
el transcurrir de la vida de un chaval, del cual no llegamos a descubrir el
nombre, que poco a poco tiene que afrontar las situaciones que se le van
presentando, sobrellevando el curioso don que le ha sido otorgado.
Conocemos al jovencito cuando aún es pequeño, cuando sus
padres le dicen “tranquilo, todo irá bien” al presentarse en un nuevo colegio.
Pero él siempre ha sido el más pequeño (no se le ocurrió a su madre otra cosa
que dar a luz en diciembre, manda narices), y eso le hace sentir incómodo,
deseando crecer, ser adulto. A lo largo de la novela vamos conociendo a este
chico sin nombre, y acudimos como espectadores a sus ocurrencias, a sus noches
en vela de estudio, a sus amores y desamores.
Si algo quiero destacar, y lo tengo apuntado porque es lo
que más me ha llamado la atención, es la forma en la que nuestro protagonista
va madurando. Marc ha sabido meterse primero en la piel de un niño pequeño para
ir creciendo progresivamente entre sus páginas y pasar a ser un estudiante
universitario totalmente entregado a su carrera. Un joven aun anclado a su
infancia, la cual cree que se le ha ido perdiendo en diferentes etapas.
En cuanto a los personajes, cada uno de ellos me ha aportado
un millón de cosas. Nuestro protagonista me ha ayudado a dar un paso adelante y
dejar entre las lágrimas derramadas por culpa de este libro, una pequeña parte
de mi infancia, Luc ha sido un apoyo constante, ese amigo que siempre está para
lo que se necesita, que más que amigo, es hermano. Sophie me ha recordado a mí
misma hace unos años y he deseado con todas mis fuerzas darle un abrazo, Cleá
me ha demostrado que no hacen falta palabras para expresar mil cosas, Yves, que
a veces duele demasiado mirar atrás y es mejor soñar, y la madre de nuestro
protagonista… Me ha recordado tanto a la mía que la he adorado.
En definitiva, El pequeño ladrón de sombras es una historia
enternecedora, perfecta para devorar de una sentada. Una historia para soñar,
para volver a nuestra infancia unos minutos, para creer en las segundas
oportunidades. Marc Levy sabe llevarte a su terreno y hacer que quieras
quedarte en él.
La verdad es que este autor nunca me ha llamado pero tiene muy buena pinta, me apetece leer algo del estilo *_* me lo apunto^^
ResponderEliminarHola guapa!!!
ResponderEliminarPues la primera vez que vi este libro creo que pensé algo así como "menuda mierda", sí, muy fina yo XDDD Pero está mejor de lo que esperaba :D Lo tendré en cuenta, palabra ^^
Me alegro de haberte animado un poco el día con las portadas jajaja Y si estás algo decaída tranquila, que todo se pasa ;)
Un besote!!
Gracias por la reseña, me pensaré si lo adjunto o no a la lista de pendientes porque ya tengo un montón...
ResponderEliminarBesos y ¡nos leemos!